Una alambrada atravesaba el valle.
Las flores y los arbustos estaban rodeados de alambre,
sus tallos y ramas se ahogaban en alambre.
Delante de la alambrada había un hombre,
rodeado de alambre, apresado por el alambre.
La alambrada, el alambre, eran de espinos,
y se clavaban en todo lo que tocaban.
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